viernes, 26 de abril de 2013

La Cruz de Camarolos


La Cruz, con 1.444 metros de altitud, es la segunda cumbre de importancia y más conocida, después del Chamizo (1620 mts.), en la Sierra de Camarolos. Para hacer esta ruta debemos dirigirnos por la autovía de Málaga –Granada, hasta Villanueva del Rosario. Una vez en el pueblo hay que dirigirse a la Ermita Nuestra Señora del Rosario - hay carteles indicadores. Tras la Ermita, sale un carril de tierra en buen estado en dirección a los Llanos del Hondonero; pero mucho antes, en un carril que sale a la derecha, podemos dejar el coche.


Comenzamos por este carril...






...y en seguida nos encontramos con un cortijo y el famoso Tajo de la Madera




El carril continúa durante un rato en constante subida... 




...y nos brinda bonitas perspectivas.
 




En un giro a la derecha, termina el carril, atravesamos una valla y cruzamos un precioso valle muy verde y frondoso





Y vamos teniendo buenas vistas del cordal de la Sierra de Camarolos, con el Chamizo siempre sobresaliendo





Al final del prado cruzamos una angarilla que da a otro pequeño carril. Aquí hay que tener cuidado porque poco después hay que girar totalmente a la izquierda buscando otra angarilla para pasar el vallado. Podemos tomar como referencia esta formación rocosa y la vista de Villanueva del Rosario.





Aquí comienza lo más duro; fuerte subida, con piedras y sin sendero


 

Zoom con el Chamizo a la izquierda y al fondo Sierra Nevada.




Cresta y cortados cerca de La Cruz, con La Maroma detrás.




Este paisaje para mí es espectacular.
 

 El tramo final –como suele suceder en muchas montañas- requiere mayor concentración y esfuerzo; no hay veredas, ni sendas, ni hitos.



Después de un último collado tenemos a la vista la cumbre... 

 
 
...donde disfrutamos un buen rato, con fotos, comida, risas...











... y unas vistas estupendas, de las que se quedan grabadas en la retina.









Nevero en el tajo norte a los pies de la Cruz




El regreso lo hacemos por el mismo camino, recreándonos en el paisaje.







Y nos tumbamos en el prado, cautivador. Nos dejamos llevar; es como recargarse de energía.







No hay comentarios:

Publicar un comentario